Daniel Guzmán, cineasta español de 51 años, conocido por su trabajo como director, guionista, productor y actor, estrena su tercer largometraje, La deuda.
, la cual abre la vigésima octava edición del Festival de Málaga. Esta obra completa su trilogía de narraciones urbanas, que comenzó con su película A cambio de nada.
y proseguida con la película Canallas
Trama y Temática
Argumento y Temática
Orígenes Personales del Director
Raíces Personales del Director
Colaboraciones Creativas
El reparto de La deuda
está compuesto por actores conocidos como Itziar Ituño, Susana Abaitua, Luis Tosar y Rosario García. Guzmán destaca la relevancia de colaborar con estos talentosos artistas, que brindan profundidad y autenticidad a los roles. La participación de Rosario García fue particularmente notable, teniendo en cuenta su avanzada edad y las restricciones físicas que supuso su inclusión en el proyecto.
incluye a actores reconocidos como Itziar Ituño, Susana Abaitua, Luis Tosar y Rosario García. Guzmán resalta la importancia de trabajar con estos profesionales, quienes aportan profundidad y autenticidad a los personajes. La colaboración con Rosario García fue especialmente significativa, considerando su avanzada edad y las limitaciones físicas que implicaba participar en el rodaje.
A diferencia de la creencia común de que el cine social carece de atractivo visual, Guzmán busca proporcionar una experiencia tanto estética como emocionalmente poderosa. La película mezcla elementos de thriller con un análisis profundo de las relaciones humanas y las dinámicas sociales en entornos urbanos.
Recepción y Perspectivas
El estreno de La deuda
La presentación de La deuda
en el Festival de Málaga ha generado expectativas positivas tanto en críticos como en audiencias. La crítica ha elogiado la capacidad de Guzmán para abordar problemáticas sociales actuales sin sacrificar la calidad narrativa y visual. Se anticipa que la película contribuya a abrir diálogos sobre temas relevantes en la sociedad contemporánea, como la especulación inmobiliaria, la vulnerabilidad de las personas mayores y la búsqueda de afecto en contextos urbanos.