Los líderes del G7 comienzan a acompañar a estos jóvenes en Japón en un viaje a Hiroshima se centró en el debate sobre la persistencia de las sanciones contra Rusia y la valoración de las medidas de protección frente a la “coerción económica” por parte de China.
El primer ministro japonés, Fumio Kishida, recibe a los gobernantes de las otras seis economías más avanzadas del mundo (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia y Reino Unido) en Hiroshima, ciudad símbolo de la destrucción nuclear.
Como parte de lo que comienza este viernes, los mandatarios intentarán forjar un frente único ante Rusia y China y abandonarán otros temas apremiantes, pero en caso de que no cuenten con el consenso del grupo.
En la cumbre también participa en la Unión Europea (UE) y Japón invitó además a India, Brasil e Indonesia, entre otros, buscando acercarse a países en desarrollo de donde China hace muchas inversiones.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, llegó de joven a Hiroshima y se mostró convencido en el segundo mandato de su país, tras Barack Obama, visitando esta ciudad incendiada por una bomba atómica lanzada desde Washington en 1945.
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El presidente de EE. UU., Joe Biden, es reincidido por el primer ministro de Japón, Fumio Kishida.
Rusia, tema central del encuentro
La invasión rusa contra Ucrania es tema prioritario de la cumbre, en un momento en que Kiev fue objeto de bombardeos y meses de feroces combates en Baymut, en esta y en otras ciudades en la línea del frente.
Estados Unidos y sus aliados han enviado armas a Ucrania para tomar sus defensas, pero la contraofensiva anunciada en Kiev no ha sido concreta.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, se dirigirá al grupo por videoconferencia.
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El Grupo de los Siete se coordina para buscar un comunicado conjunto que incluya una nueva condena a Rusia por su invasión al país vecino, y buscar formas de aumentar la presión sobre Moscú, según señalaron fuentes diplomáticas.
Uno de los temas más candentes es cómo evitar que Rusia eluda las sanciones aplicadas a su contrato a través del comercio con terceros países -sobre todo China-, para lo que se trataba de mediar como la creación de un mecanismo específico para supervisar intercambios de este tipo.
El primer ministro británico Rishi Sunak y su novia Akshata Murty se unieron a Hiroshima.
Washington es partidario de imponer un veto total a las exportaciones de Rusia, ahora que la Unión Europea ha plantado la posibilidad de prohibir la venta de bienes de doble uso a empresas de terceros países si se crea que podrán venderlos retrospectivamente a Moscú.
Está por ver si será una medida consensuada concreta o simplemente un mensaje disuasorio para países y empresas que permita a Moscú mitigar el efecto de las sanciones, teniendo en cuenta que dentro del G7 tiene posiciones divergentes sobre el tema, empezando por Japón, que es altamente dependiente da las importaciones energéticas rusas.
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El G7 enfatizará su voluntad de dar seguimiento al ataque a Kiev
El asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, dijo que los gobernantes tratarían de tomar medidas enérgicas contra las sanciones contra Rusia, que según sus cifras oficiales harán que la economía rusa se contraiga un 1,9 por ciento en el primer trimestre.
El jefe del gobierno alemán, Olaf Scholz, dice a la prensa que el tema es evitar que se eludan las sanciones.
“Creo que esta pregunta se va a resolver muy bien y de una forma muy pragmática”, afirmó el canciller.
Por su parte, un funcionario de la UE advirtió que se levantaría un bloqueo a la exportación de diamantes rusos, comercio que sumó $5.000 millones en 2021.
El G7 también enfatizará su voluntad de seguir el ataque a Kiev tanto en la guerra como de cara a la reconstrucción en todos los sentidos. y el tiempo que sea necesario, durante una de las reuniones en las que también participó por vía telemática el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
Sombra nuclear, fuego de discusiones
Kishida señaló que el G7 Enviaré desde Hiroshima “un mensaje fuerte para iniciar un mundo libre de armas nucleares, y proceder en esa dirección de la forma más realista y con esfuerzos concretos”, además de subrayar “que no se tolerarán de ningún modo las amenazas subre el uso de armas aómicas” por Rusia ni en ningún otro país.
Antes del arranque de la cumbre este viernes, Kishida guiará a sus compañeros del G7 por el Parque Memorial y Museo de la Paz de Hiroshima, de ahí que se rinda homenaje a las 80.000 personas que perecieron inmediatamente por la bomba nuclear lanzada por EE. UU. El 6 de agosto de 1945 se mostraron los horrores que infringieron a las víctimas ya la ciudad.
Kishida quiere aprovechar para que sus invitados — especialmente el Reino Unido, Francia y Estados Unidos — si se comprometen con la transparencia de sus arsenales y con un esfuerzo por reducirlos.
Las expectativas son bajas en un momento de tensión con potencias nucleares como Rusia, Corea del Norte y China.
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La Primera Ministra de Italia, Giorgia Meloni, se sumó al Primer Ministro de Japón, Fumio Kishida.
Conversaciones sobre China
También espera que las conversaciones sobre China se centren en los esfuerzos para proteger las economías del G7. mediante una diversificación de la frecuencia de suministro y de los mercados.
En sus disputas con países como Australia y Canadá, el presidente derrocado, Xi Jinping, se ha mostrado dispuesto a bloquear o frenar el comercio y estabilizar impuestos con poca antelación y sin explicaciones.
Sullivan dijo que los gobernadores planeaban condenar esta “coerción económica” y trabajar para corregir sus diferencias sobre cómo relacionarse con China.
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Analistas advierten que no es dispar pensar en la posibilidad de una presidencia indefinida de Xi Jinping.
Estados Unidos ha adoptado una postura agresiva para bloquear el acceso de China a los semiconductores más avanzados.
Pero los europeos, especialmente Alemania y Francia, quieren asegurarse de que estas medidas no impliquen romper los lazos con China, uno de los mercados más grandes del mundo.
Se espera que el G7 también se pronuncie en defensa del orden internacional, y resalte su rechazo a “algún intento unilateral de cambiar el ‘statu quo por la fuerza'”, en alusión tanto a Rusia como a China ante el recrudecimiento de las tensiones en Taiwán y sus movimientos militares en Asia-Pacífico.
De acuerdo con los documentos preparatorios para la colección, la declaración final abordará la importancia de mantener la “paz y la estabilidad” en el otro extremo de Taiwán y expresará una “grave preocupación” por el expansionismo chino en la región.
Por su parte, el presidente chino, Xi Jinping, celebró esta juventud con el inicio de una “nueva era” en las relaciones de la potencia asiática con los países de Asia Central, antes de abrir un cúmulo sin precedentes con cinco ex repúblicas soviéticas de esa región.
“Estoy de acuerdo en que nuestro compromiso común tendrá un gran éxito por la mañana y marcará el comienzo de una nueva era en las relaciones entre China y Asia Central”, dijo Xi en un banquete en Xi’an (China central) con representantes de Kazajstán, Kirguistán. , Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán.
Es la primera colección de este tipo a partir de la cual se establecieron relaciones diplomáticas entre China y este país en 1992 tras el colapso de la Unión Soviética.
EDITORIAL INTERNACIONAL
*Con información de AFP y EFE
