Gaza sufrió este jueves fuertes ataques aéreos israelíes, entre ellos contra panaderías y un edificio de 14 plantas reducido a escombros, lo que causó decenas de muertos, según fuentes palestinas, mientras que las milicias del enclave lanzaron más cohetes hacia territorio israelí en el decimotercero día de guerra.
La aviación israelí bombardeó la torre Al Andalus, de 14 plantas y situada en la zona de Karama, en el norte de la Franja, que quedó completamente destruida, informó el Ministerio del Interior de la Franja, controlada por el movimiento islamista Hamás, aunque por el momento no hay cifras de víctimas.
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A su vez, Israel bombardeó las inmediaciones de varias panaderías del enclave, «cuando docenas de ciudadanos se congregaban y hacían fila para comprar pan, lo que causó decenas de muertos y cientos de heridos», denunció la oficina de medios del Gobierno de Gaza, que aseguró que los ataques fueron en cinco puntos distintos desde el norte al sur del enclave.
Otro ataque aéreo contra una casa en el centro de la ciudad sureña de Jan Yunis dejó 13 muertos y numerosos heridos, según la agencia oficial de noticias palestina Wafa, que agregó que aviones de combate atacaron cuatro torres residenciales en la localidad de Al Zahra, en el centro de Gaza.
Escombros de un edificio residencial derribado por un ataque aéreo israelí, en el campo de refugiados de Jan Yunis.
Los bombardeos de las últimas horas, que según el Ejército israelí fueron contra cientos de puestos militares y de instalaciones de Hamás que quedaron destruidas, mataron también a altos cargos del grupo islamista y de las milicias palestinas, entre ellas Rafat Harb Husein Abu Bilal, jefe del ala militar de la organización Comités de Resistencia Popular, la tercera milicia más grande de Gaza.
La primera mujer en ocupar una posición en la oficina política de Hamás, Yamila al Shanti, también falleció este jueves por un bombardeo israelí en su casa en Gaza.
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Además, según la oficina de medios del Gobierno gazatí, un tercer muerto de peso en la ofensiva de este jueves fue Yihad Muheisen, comandante de las Fuerzas de Seguridad Nacional, órgano de seguridad militar en los territorios palestinos que en Gaza está controlado por Hamás.
Durante la jornada de este miércoles, las milicias gazatíes siguieron lanzando cohetes hacia Israel, sonando las alarmas en comunidades israelíes cercanas a Gaza o en la ciudad de Tel Aviv, y las brigadas al Qasam -brazo armado de Hamás- lanzaron también ráfagas de cohetes hacia la localidad de Ashkelon.

Un joven palestino cargado de pan pasa junto a edificios destruidos en Gaza.
ONU advierte sobre viviendas destruidas
Este jueves, en el decimotercer día de guerra, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU informó que más de 98.000 unidades residenciales en Gaza, que representan aproximadamente el 25 % del total en la franja palestina, han sido destruidas o han sufrido daños en la actual ofensiva israelí contra Hamás.
En su informe diario sobre la situación en la zona desde los ataques terroristas del 7 de octubre, la oficina subraya que esa estimación es conservadora, ya que es imposible el acceso a zonas gravemente golpeadas por los bombardeos, especialmente en la ciudad de Gaza, capital de ese territorio palestino.
Sólo en la noche del 17 al 18 de octubre fue destruido un edificio residencial en Al Bureij (Gaza central), donde murieron 25 persona, y otros varios corrieron la misma suerte en Jabalia (norte de la franja), donde hubo 37 muertes, destacó Naciones Unidas.
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Miembros de la defensa civil palestina buscan sobrevivientes entre los escombros de un edificio alcanzado durante el bombardeo israelí en Khan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza.
JAMONES MAHMUD. AFP
La coordinadora humanitaria también contabiliza, usando datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), 59 ataques a instalaciones sanitarias, con 491 muertos (incluidos 471 en el hospital de Al Ahli, alcanzado por un misil el martes).
También han sufrido daños 170 instalaciones educativas, incluidas 20 utilizadas por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA), así como un edificio universitario, siete iglesias y once mezquitas.
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Tras el ataque al hospital de Al Ahli, uno de los peores sufridos por una instalación sanitaria en el mundo en los últimos años, Naciones Unidas eleva los fallecidos en Gaza desde el 7 de octubre a 3.478, de los cuales 853 de ellos niños, y los heridos a 12.500.
A ellos hay que sumar unas 1.300 personas muertas y 4.562 heridas en Israel (casi todas en los ataques terroristas del 7 de octubre) y 64 fallecidos (18 de ellos niños) y 1.284 heridos en Cisjordania, a manos de fuerzas israelíes o en enfrentamientos con colonos.

Convoy de ayuda humanitaria para la Franja de Gaza aparcado frente a la puerta fronteriza de Rafah, Egipto.
Las órdenes para que los gazatíes del norte se trasladen al sur de la franja por parte de Israel han causado, además, más de un millón de desplazados, de los que unos 513.000 se alojan en instalaciones de la UNRWA.
Unos 14 trabajadores de la UNRWA han perdido la vida desde el 7 de octubre a causa de las hostilidades, así como ocho personas refugiadas en sus instalaciones, destacó esa agencia en un comunicado, denunciando 32 ataques a sus edificios por parte de las fuerzas de defensa israelí.
«Los refugios de UNRWA están saturados, con limitados suministros de comida, agua potable y artículos de higiene. Las condiciones límite, unidas al trauma de la guerra, han comenzado a alimentar tensiones entre los desplazados», aseguró la organización.
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Unas 3.000 toneladas de ayuda humanitaria permanecen a la espera de que se permita la entrada a las organizaciones humanitarias a través del paso de Rafah, en la frontera de Gaza con Egipto, que permanece cerrado, como también lo están las que unen la franja con el territorio israelí en Erez y Kerem Shalom.
Naciones Unidas recuerda que Gaza ha soportado ocho días consecutivos sin electricidad, y que el agua corriente sólo se puede obtener en Jan Yunis, en el sur de Gaza, zona donde las fuerzas israelíes han ordenado que se concentre la evacuación.
Según el Programa Mundial de Alimentos de la ONU (PMA), hay suministros de comida en la franja para sólo dos semanas, aunque muchos de ellos están almacenados en la ciudad de Gaza, de difícil acceso a causa de las hostilidades, mientras que los alimentos en las tiendas podrían acabarse antes de que termine esta semana.
REDACCIÓN INTERNACIONAL
*Con EFE